Cada día que te veo cuento los días para que esto termine, para que mi corazón deje de latir de esa manera, para que el color de mis mejillas regrese a su tono normal, para dejar de mirarte como lo suelo hacer.
Desde ese día entendí que no sentimos lo mismo, tu corazón y el mío no late de la misma manera, no pide el contacto de tus labios con los míos, no pide que tu mirada se pose en los míos, que tus manos no pidan las mías, que tu cuerpo no desee acercarse al mío, todo cambio, ya nada puede tener sentido para esto, ya no puedo imaginarte a mi lado.
Es un secreto que llevare conmigo, quedara ahí en ese cuarto, las paredes y la puerta impedirán el paso de la verdad, la verdad de mis sentimientos, tus besos de saludo se los llevara aquel viento que entraba con el abrir y cerrar de las puertas, ventanas.
Lagrimas que siento caer alrededor de mis mejillas cuando te veo mirar a otra, cuando pides estar a su lado y yo solo oculto algo que ella no te puede dar. Cuando tus ojos vean la verdad, ya no podre estar ahí, para mirarte y decirte lo que mi corazón gritaba pero solo toqué tu hombro.
